Trampa del Vaticano y actuación de entes malignos.

He tenido acceso a unos documentos secretos de una prestigiosa agencia de espionaje (no diré cual es porque peligraría mi vida y no quiero morir tan joven) según los cuales Su Santidad Benedicto XVI no salió del Vaticano el pasado mes de Agosto. Y ustedes se preguntarán: quién fue el impostor que estuvo en Madrid? Buena pregunta. En Madrid estuvo un doble del Papa. La Curia Romana, muy preocupada por la delicada salud del Sumo Pontífice, creyó conveniente no exponer al Sucesor de San Pedro a la dureza de un viaje tan agotador, por lo cual determinaron que alguien sustituyese al Cabeza Visible de la Iglesia en su periplo madrileño. Tampoco puedo facilitar la identidad del doble del Papa porque Rouco Varela me enviaría inmediatamente dos sicarios para que me mandasen al Infierno sin que me diese tiempo a confesar mis innumerables pecados y recibir la Sagrada Extrema Unción. Comprenderán ustedes que cuando los pecados son innumerables se necesita un tiempo para confesarlos.
También me han revelado estos documentos que las jovencitas que acudían a confesarse en mini short o se quedaban en sujetador delante de la muchedumbre peregrina, eran seres malignos encargados de provocar pensamientos impuros entre las buenas gentes de la Iglesia. Y aún hay mucho más: algunas de estas criaturas demoniacas fornicaron con los legionarios, tanto los de Cristo como los de Millán Astray.
Confieso que, tras la lectura de tales documentos, me encuentro en un terrible estado de ansiedad y confusión que llega a provocarme horribles pesadillas: se me aparece la Duquesa de Alba bailando sevillanas en mini short con Calimero, mientras se escucha una voz procedente del subsuelo: "Basta ya de escándalos, que no me dejais dormir!" Es el coronel Gadafi desde su refugio atómico. (Y ahora que lo pienso: Se tratará de una pesadilla doblada al castellano, porque el coronel Gadafi habla otro idioma, no?)